
Todos lo pabellones estaban muy bonitos, tenian y trasmitian ideas muy originales ademas de verdaderas, con objetos que aun atraian mucho más a las personas hacia los pabellones. Y Fluvi y sus amigos estaban ansiosos porque la gente les viera y
aprendieran a cuidar este maravilloso mundo que tenemos.
Llego el dia de la inaguracion la gente corria y corria para llegar a sus pabellones favoritos, uno de los que tuvo mas exito fue el de España, Andalucia, uno que te trasladaba a un mundo perfecto a traves de barcas y el de agua extrema., que era una especie de atraccion.
Eeran tantos sentimienos, emociones y lugares bonitos, que tardaria una vida en contarlos. Aun hoy me emociono de recordar todo aquello. Asistí al mejor espectaculo de toda la Expo, el día en que se acababa todo, la Expo, los pabellones, las actuaciones... todo. Vi la actuacion de Iceber que para acabar mostraron unos preciosos fuegos artificiales, fueron los mejores que he podido ver. Estaba orgullosa de todo lo que había hecho mi ciudad, los voluntarios...todo. Pero aquel día se acabó todo.
Días después veia como iban destruyendo lo que nos había hecho más famosos, y pensaba que no tenía sentido que preparan la Expo para que tres meses después la destruyeran. Hoy todavia podemos visitar la telecabinas y el acuario, pero eso que queda, no es nada comparado con todo lo que había aquél día.
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